BY MOSER
“Mientras la glucosa es absorbida por la sangre, nos sentimos animados. Un estímulo veloz. Sin embargo, a este impulso energético le sigue una depresión, cuando se desprende del nivel de glucosa sanguínea. Estamos inquietos, cansados; necesitamos hacer un esfuerzo para movernos o incluso pensar. Hasta que se eleva de nuevo el nivel de glucosa… Podemos estar irritables, alterados. La gravedad depende de la sobredosis de glucosa. Si continuamos tomando azúcar, una nueva crisis empieza siempre antes de terminarse la anterior. Al final del día pueden ser enloquecedoras. Tras varios años con días así, el resultado final son glándulas adrenales enfermas, agotadas no por exceso de trabajo, sino por un ajetreo continuo. La producción de hormonas, en general, es baja. Las cantidades no se amoldan. La alteración funcional, desequilibrada, se refleja en todo el circuito endocrino. Muy pronto el cerebro puede encontrarse en dificultades para distinguir lo real de lo irreal; estamos expuestos a volvernos precipitados, cuando el estrés se interpone en el proceso, nos desmoronamos porque no tenemos ya un sistema endocrino sano para enfrentar cualquier contingencia. Día a día nos encontramos con una falta de eficiencia, siempre cansados, nada logramos hacer, realmente sufrimos los “sugar blues” (o depresiones del azúcar)…”
Extracto del libro Nutrición Consciente de Laura Urbina
Un poco de historia
Ya advertíamos en depreambulo que la historia del azúcar en el mundo occidental es relativamente reciente; antes del siglo VI apenas si hay referencias; es entonces el imperio persa desarrolla el refinado y su comercio; antes solo algunos profetas la mencionaron como un caro y raro lujo proveniente de oriente. Allí su uso tampoco formo nunca parte de la nutrición diaria; su uso era limitado y principalmente con fines rituales (especialmente vinculado a la celebración del matrimonio) o médicos.
En edad contemporánea se inician las grandes plantaciones esclavistas de caña de azúcar en Norteamérica y de remolacha posteriormente en Francia de la mano de Napoleón. Desde entonces y en adelante su consumo tendrá un incremento brutal; en 1800, la producción anual mundial se situaba en menos de 250,000 toneladas; a finales del siglo XX la producción se calculaba en 92 millones.Mientras que la población se multiplico por 6, la producción de azúcar lo hizo por 368.
Método de refinado
El azúcar que generalmente consumimos de manera explicita o como añadido en infinidad de productos (se calcula que puede estar presente en el 90% de productos manufacturados) es azúcar refinada; lo que popularmente se conoce como azúcar blanca.
Durante el proceso de refinamiento del jugo de la caña de azúcar este se ve sometido a toda suerte de procesos y añadidos químicos:
Para dejar limpio el líquido que contiene el azúcar, se le añade cal. En este momento, la reacción alcalina destruye casi todas las vitaminas. En el líquido, mezclado con cal viva, se introduce dióxido de carbono, para así precipitar la cal. El líquido "saturado" se conduce hacia las bombas de filtración que separan las el líquido azucarado de las impurezas. Tras otro tratamiento con sulfato de calcio, por el cual el ácido sulfúrico lo decolora hasta dejarlo casi blanco, se hierve el líquido hasta que espesa. Una centrifugación permite separar el jarabe del azúcar crudo llamado melaza, un producto que contiene muchas sustancias que no son propias del azúcar.
Extracto del libro Veneno en el alimento del Dr.lezner
Durante el proceso se eliminan, además de las vitaminas, toda la fibra y el 90% de las proteínas de la planta; conlleva la desnaturalización del azúcar; y cumple así, con el principal requisito de los ANTIALIMENTOS.
También con el azúcar se produce la implantación de un nuevo uso alimenticio; pasando, en a penas 2 siglos, de ser una sustancia cuyo uso resultaba muy restringido, no solo por cuestiones de accesibilidad, sino también por sus propiedades mas propias del psicoactivo que del nutriente (cuestiones en las que adelante profundizaremos), a ser una sustancia indispensable y casi omnipresente en nuestras dietas en la actualidad.
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