ByCineclásicajazz Pizcadelodemás
En alguna ocasión leí sobre lo curiosas que son las carátulas de los discos de música clásica. Normalmente en un tamaño de letra soberbio, enmarcado, con letras doradas y muy visible aparece el director estrella o el músico solista protagonista de tal o cual pieza o la primadonna o tenor de turno. En segundo lugar, con menos "pompa y circunstancia" y con caracteres más pequeños y modestos, la formación orquestal que va a ejecutar la obra y en tercer lugar, muy alejado ya del protagonismo de los anteriores aparecerá humildemente el nombre de algún Johann Sebastian Bach, Beethoven o Mozart y de su obra. En ocasiones, como en el caso de la foto, Beethoven no merecía ni tan siquiera las mayúsculas para iniciar su nombre, mientras que el amigo Karajan, se las guardaba todas para sí y su filarmónica. Es una jerarquía que siempre me resultó curiosa. ¿Qué sería del talento de cualquiera de esas estrellas temporales sin las creaciones inmortales de los que fueron dejados para el último rincón de los títulos????? En ésta línea va la siguiente anécdota:
En cierta ocasión el compositor Amadeo Vives se acercó a un ensayo y dirigiéndose a los presentes, preguntó:
-¿Están ya los músicos a punto?
Uno de los miembros de la orquesta, molesto con el apelativo que le habían otorgado, le contestó:
-Por favor, maestro, nosotros no somos los músicos, somos los profesores.
Vives en un momento de agudeza mental y de forma espontanea le replicó:
-Tiene usted toda la razón. Los músicos son Bach, Beethoven, Schumann, Mozart, Chopin….. Ciertamente vosotros sois los profesores.
Genial!!!!
La publicación original aquí, en la pagina de nuestro compañero: http://www.facebook.com/group.php?gid=126815644036357
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