TEOLOGOS DEL VACIO. PARTE 3. LA CRONOLOGÍA DE USSHER
Perpetrado por Oskarele
Buscando información sobre el tema del creacionismo, al que hemos dedicado un par de articulillos, me topé con un curioso calendario del siglo XVII en el que se intentaba hacer una cronología de la historia de la Humanidad y la Tierra en base las Sagradas Escrituras.
Fue obra, como no, de un arzobispo irlandés y en la actualidad se asocia con el Creacionismo de la Tierra Joven, ya que parte de la idea, ridícula pero maravillosa, de que el Universo fue creado hace unos cuantos milenios.
El arzobispo en cuestión fue un tal James Ussher, también conocido por su nombre latinizado, mucho más bonico, Jacobus Usserius, un irlandés de Dublín nacido en 1581 y fallecido en 1656. Fue ordenado cura en 1601 y tuvo una carrera ascendente, tanto que en 1625 fue designado primado de la Iglesia Anglo-Irlandesa. En 1642, cuando estalló la guerra civil, Ussher se encontraba en Inglaterra, y ya nunca regresó a Irlanda y fue precisamente por esta época cuando escribió su obra más conocida y la que más nos interesa a nosotros, “Annales veteris testamenti, a prima mundi origine deducti” (Anales del Viejo Testamento, derivados de los primeros orígenes del mundo), aparecida en 1650.
En esta obra narra su delirante (visto desde nuestro actual y especialmente escéptico punto de vista) planteamiento sobre la Historia del Mundo y la Humanidad.
Pa empezar, según Ussher, el primer Día de la creación comenzó el atardecer anterior al domingo del 23 de octubre del año 4004 a. C. del calendario Juliano, cerca del equinoccio de otoño.
¿Por qué esa fecha?
Pues porque por aquel entonces se creía que la vida potencial de la Tierra era de 6.000 años, cuatro mil antes de Cristo y dos mil después, correspondientes a los seis días de la creación, basándose en aquello de que “con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día” (en 2Pedro, 3.8).
El principal problema al que se enfrento, como tantos otros que se propusieron lo mismo, fue que la Biblia fue compilada a través de diferentes siglos, con diferentes versiones y saltos cronológicos.
Así propone tres grandes fases históricas:
Era temprana (Desde la creación hasta la época del Rey Salomón). Al parecer el período más fácil, ya que la Biblia señala un linaje masculino continuo desde Adán y Eva hasta Salomón, junto con las edades de los individuos involucrados. Sin embargo, no todas las versiones de la Biblia proporcionan las mismas edades. Ussher resolvió este problema apoyándose en la Biblia hebrea.
Primera era de los Reyes (Desde Salomón a la destrucción del templo de Jerusalén y al destierro babilonio de Judea). El linaje se interrumpe en este punto, disponiéndose solo de la duración del reinado de los reyes y con numerosos solapamientos y ambigüedades. Ussher tuvo que cruzar los registros bíblicos con fechas conocidas de otras personas y gobernantes para crear una cronología integrada.
Segunda era de los Reyes (De Esdras y Nehemías al nacimiento de Jesús). No se proporciona información en la Biblia. Tuvo que vincular cada acontecimiento conocido de este periodo con otro datable en otras culturas, como las de los caldeos, persas o romanos.
Así que, basándose en este división temporal, propuso la fecha de la Creación, como ya hemos dicho en el 4.004 a. C. ya que, haciéndose eco de Flavio Josefo, que comenta que la muerte de Herodes el Grande ocurrió en el 4 a. C. Jesús tuvo que nacer en ese mismo año, como mínimo, en lugar de en el año 1.
Aunque parezca absurdo, en su momento la estación en la que tuvo lugar la creación era un tema de discusión entre los sabios teólogos de entonces. Unos pensaban que fue en Primavera, otros, en cambio, proponían el otoño, en gran medida porque esa estación marcaba el principio del año judío. Ussher era de estos últimos, y parece ser que empleó las Tabulae Rudolphinae de Kepler (Tablas Rudolfinas, 1627).
Usándolas, habría concluido que el equinoccio ocurrió el martes 25 de octubre, solamente un día antes que el día tradicional de su creación, en el cuarto día de la semana de la creación, miércoles, junto con el Sol, la Luna, y las estrellas (Génesis 1,16). Los cálculos modernos sitúan el equinoccio otoñal de 4004 a. C. el domingo 23 de octubre.
Esta sería, grosso modo, la historia del mundo narrada en la Biblia y datada por Ussher:
23 oct 4004 a. C. - Creación.
28 oct 4004 a. C. – Se crea la humanidad. Poco después, el 10 de noviembre de 4004, fueron arrojados del paraíso.
2348 a. C. - Diluvio universal.
1921 a. C. - Llamamiento de Dios a Abraham.
1491 a. C. - Éxodo de Egipto
1012 a. C. - Fundación del Templo de Jerusalén.
586 a. C. - Destrucción del Templo de Jerusalén por Babilonia y comienzo del destierro babilonio.
Año 4 a. C. - Nacimiento de Jesús.
Sobra decir que este señor se equivocaba, pues hoy sabemos con bastante seguridad que el Universo tiene como 13.000 millones de años y la Tierra, y el sistema solar, unos 4.500. Y el ser humano moderno, el Homo sapiens, comenzó a pisotear la Tierra hace unos 150.000 años.
Mas info y fuentes por aquí: http://tematicacristiana.blogspot.com/2008/06/james-ussher-arzobispo-de-armagh.html, aquí: http://es.wikipedia.org/wiki/Calendario_de_Ussher-Lightfoot; aquí: http://en.wikipedia.org/wiki/James_Ussher, aquí: http://en.wikipedia.org/wiki/Ussher_chronology.
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Decir "sabemos que este hombre se equivocaba" (en alusión a Usher)es ir muy lejos. La realidad es que no se sabe NADA CONCRETO que pueda refutar las fechas de Usher basadas en la Biblia. Las técnicas usadas por la ciencia moderna para fechar la edad del universo, o de la tierra, no ofrecen un nivel de confianza 100% seguros. Es arrogante y presumido afirmar que "SABEMOS" que, por ejemplo, la tierra tiene unos 5.000 millones de años. La verdad es que no SABEMOS NADA CONCRETO. Toda la ciencia moderna ha dado estos datos en base a técnicas de fechado que requieren de condiciones ideales para ser exactas. Tales condiciones generalmente no existen, por lo que los resultados son poco confiables. Afortunadamente después de miles de años, aún existe ese Libro, La Biblia. Recomiendo leerla para encontrar ciencia verdadera, y más importante aún, a Jesu Cristo, quien puede dar vida eterna.
ResponderEliminarArrogante es considerar que la Biblia puede aportar ciencia verdadera...
ResponderEliminarciencia verdadera, por ejemplo, el libro de job, escrito hace aproximadamente 3500 años atrás, ya mencionaba que la tierra tenía forma esférica (de globo), algo que sólo fue seguro hasta el siglo XV, cuando Colón llegó a América. Por supuesto, los honestos "científicos verdaderos" le dan el crédito a Aristóteles, quien cerca del 300 a.C. observó que la tierra proyectaba una sombra circular. LA BIBLIA LO HABÍA DICHO POR LO MENOS 1000 AÑOS ANTES...ESO ES CIENCIA.
ResponderEliminarPor eso condenaron a Copérnico o a Galileo.
ResponderEliminarBueno, cuando hablo de la Biblia, no me refiero a la iglesia católica. Seguramente esa religión no puede estar más lejos de lo que la Biblia revela. La Biblia no condenó a Copérnico o a Galileo. Fue la Iglesia Católica quien lo hizo. La Biblia NUNCA ha apoyado ninguna religión. La religión es MALVADA y MENTIROSA. Jesu Cristo no es religión. El sólo quiere salvar a los hombres del problema REAL que tú y yo tenemos: EL PECADO. Si no crees en el pecado, convence a tu conciencia de eso. Jesús te quiere salvar Oskarele, y dejó su palabra escrita y preservada para que tú le conozcas. Muchos dicen creer la Biblia y sin embargo ellos mismos se contradicen unos a otros. LEELA TÚ MISMO, Y LUEGO DECIDE SI ES LA VERDAD O NO. Aquellos que la hemos leído, sabemos que sólo algo sobrenatural pudo haber inspirado y presevado el Libro (no la iglesia católica). Dios te bendiga.
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