LA EXTRAÑA CABEZA ROMANA DE CALIXTLAHUACA
Perpetrado por Oskarele
En 1933 se descubrió en el yacimiento de Calixtlahuaca ,un sitio arqueológico del período Postclásico de Mesoamérica, ubicado cerca de la ciudad de Toluca en el Estado de México, una cabeza de terracota que, posiblemente formaba parte de una figura más grande. La movida está en que la cabeza parece similar en estilo a otras piezas de origen romano, por lo que algunos argumentan que es una prueba de contactos precolombinos entre los dos mundos.
El caso es que algunos científicos si dan por valida esta posibilidad, entre otras. Por ejemplo, en el 2001, H. Romeo Hristov de la Universidad de Nuevo México y Santiago Genovés T. de la Universidad Nacional Autónoma de México, creen que es posible por la datación de la pieza. Bernard Andreae, director emérito del Instituto Alemán de Arqueología en Roma, Italia, dice lo siguiente: “es, sin duda, romana, y el análisis de laboratorio ha confirmado que es antiguo. El examen estilístico nos dice más precisamente que es una obra romana de todo el siglo II d. C., y el peinado y la forma de la barba presentan los rasgos típicos del período del emperador Severiano (193-235 d. C.), exactamente en la "moda" de la época.”
Por otro lado, las notas de campo de los arqueólogos que realizaron la excavación no han revelado posibles perturbaciones en el contexto estratigráfico, por lo que la pieza, de ser autentica, fue encontrada en un estrato profundo no en la superficie (lo que hace más difícil el fraude)
En 1995 otros científicos alemanes le hicieron una prueba de termoluminiscencia para comprobar la fecha en la que fue manufacturada, dando un intervalo que va desde el siglo IX al XIII d. C., confirmando su origen precolombino, pero no su pertenencia a la época romana.
Otros investigadores, en cambio, se muestran más escépticos. Por ejemplo Paul Schmidt, arqueólogo de la UNAM, propone que se trata de una broma. Plantea que la cabeza fue colocada en el sitio por un arqueólogo que participó en las excavaciones, Hugo Moedano, para gastarle una broma a Jose Garcia Payón, jefe de la excavación, que no pasaba demasiado tiempo allí. Curiosamente el hijo del tal Garcia Payón sostiene que su padre estaba allí en el momento del descubrimiento.
Otra posibilidad que se plantea es que fue llevado por los primeros europeos que llegaron a la zona, ya sea en la época colombina, con lo que no habría misterio, o antes, ya sea por los contactos por el norte que tuvieron los vikingos o con los posibles (y no demostrados) contactos que pudieron establecer los fenicios. Hay quien argumenta que algún barco romano, fenicio, vikingo o bereber pudo perderse y llegar hasta allí (hay que recordar que tanto romanos como fenicios llegaron a las Islas Canarias, con lo que la hipótesis del naufragio no es tan improbable).
El problema principal para creer estas teorías, y la veracidad de la adjudicación de esta pieza a épocas precolombinas, es que se encontró aislada, sin nada más que la relacione con Europa.
De haber naufragado un barco ¿Por qué solo ha quedado esta pequeña pieza, además de terracota, no de piedra?
Y de haber sido llevado por comerciantes fenicios… pues lo mismo.
Extraño, pero curioso… como casi siempre. ¿Y si era de la Atlántida?
Mas info y fuentes aquí, aquí, aquí una web a favor de las tesis romanas, aquí y aquí la web oficial del yacimiento mexicano.
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sumamente interesante pero creo que hay varios punos aislados; deveria decir en que tipo de estrato fue encontrado y si tuvo alteraciones o no y lo mas raro es que si se dato por termoluminiscencia no es muy comun que de diferencias ta avismales en su fechado ya que es sumamente fiable.
ResponderEliminarokay
ResponderEliminarokay
ResponderEliminarGenial yo vivo cerca de ahí
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