LA ESCALERA AL CIELO. PARTE 28: LAS PIRÁMIDES DE LOS DIOSES Y LOS REYES, PARTE 3. ¿REALMENTE ERAN TUMBAS LAS PIRÁMIDES?
ByOskarele
¿Cómo encaja todo este vacío hallado dentro de la Gran Pirámide con la teoría oficial de que las pirámides eran tumbas reales construidas para proteger las momias de los faraones y los tesoros con ellos enterrados, de ladrones o profanadores que podrían perturbar la paz eterna del fallecido? ¿Para qué sellar un pasillo que no lleva a nada que proteger? Sitchin se queda con esta idea: “el hecho es que no existe nada, absolutamente nada para apoyar la afirmación de que la Gran Pirámide era una tumba de un faraón” (pág. 365)
En realidad, nunca hubo indicios concretos de que las pirámides de Gizeh fueron construidas para ser túmulos reales. Y, según Sitchin, otras, como la de Djoser, la primera, tampoco contenían los restos del faraón. En esta, por ejemplo, se encontraron dos cámaras cubiertas por la mastaba inicial. En 1837, el famoso coronel Howard Vyse excavó minuciosamente el interior de la pirámide y relató haber descubierto "un monte de momias" (fueron contadas ochenta de ellas posteriormente) y haber alcanzado una cámara "con el nombre del rey Djoser pintado con tinta roja" (que casualidad... más tarde veremos porque). Hoy día es generalmente aceptado que todas esas momias y ataúdes representan entierros intrusos, o sea, muy posteriores a la de la construcción de las pirámides, aprovechando sus galerías y cámaras. La momia del rey Djoser no se encontró, o por lo menos, no se identificó.
La mayoría de los arqueólogos, en la actualidad, dudan de que Djoser fuera realmente sepultado dentro de la pirámide que tiene su nombre. Todo indica que fue enterrado en una magnífica tumba descubierta en 1928, al sur de la pirámide. Los egiptólogos creen que la pirámide era sólo un túmulo simbólico de Djoser.
La pirámide en escalones iniciada por el sucesor de Djoser, Sekhemkhet, también contenía una "cámara mortuoria", que al ser descubierta abrigaba un "sarcófago" de alabastro. Los libros cuentan que el arqueólogo que la encontró, Zakaria Goneim, concluyó que la cámara fue invadida por ladrones, que habían robado la momia y todo el contenido del compartimiento. Sin embargo, eso no es totalmente cierto. De hecho, el Sr. Goneim encontró la puerta deslizante vertical del baúl de alabastro cerrada con yeso y dentro... nada. Hoy en día muchos creen que era también una tumba simbólica.
La tercera pirámide en escalones, atribuida a Khaba, también contenía una "cámara mortuoria", encontrada vacía, sin momia aunque con el ataúd de piedra. Los arqueólogos identificaron en el área vecina las ruinas de otra pirámide, no terminada, que imaginan fue iniciada por el sucesor de este Khaba. La subestructura de granito contenía un "sarcófago" oval, de formato raro, embutido en el piso, como si fuera una bañera moderna. La tapa estaba en el lugar, lacrada con cemento; no había nada en su interior.
La exploración de la pirámide desmoronada de Meidum no reveló la existencia de cámara mortuoria o sarcófago. Se encontraron solamente algunos fragmentos de un ataúd de madera, de los que se dijo que eran los restos del féretro de Snefru. Actualmente, todos los especialistas creen que esos fragmentos provenían de un sepelio mucho más posterior, un entierro intruso, pues la pirámide está cercada por numerosas mastabas de la 3ª y 4ª. Dinastías, donde, seguramente, eran enterrados los miembros de la familia real y otras personalidadesde la época.
Las otras dos pirámides de Snefru, de acuerdo con la cronología oficial, son aún más engorrosas para aquellos que defienden la teoría de que son tumbas. La primera, la Romboidal, posee dos supuestas "cámaras mortuorias", y la segunda, la Roja, tres. Si los faraones mandaban construir pirámides para abrigar su momia después de la muerte, ¿por qué Snefru construyó dos de ellas, con tres cámaras? Además, todos esos compartimentos fueron encontrados vacíos, sin sarcófagos.
La teoría "una pirámide por faraón" afirma que la pirámide siguiente, en orden cronológico, fue construida por Kéops, el hijo de Snefru y, según Herodoto y los historiadores romanos que se basaron en sus obras, ella sería la Gran Pirámide de Gizeh. Pero de nuevo, como ya hemos explicado, sus cámaras y compartimentos, descubiertos en tiempos modernos, fueron encontrados intactos y vacios.
Eso, de hecho, no debería ser gran sorpresa, pues el propio Herodoto escribió: "Y en los diez años de fatiga empleados en la construcción del camino, no se incluye el tiempo invertido en preparar el terreno del collado donde las pirámides debían levantarse, y en fabricar un edificio subterráneo que sirviese para sepulcro real, situado en una isla formada por una acequia que del Nilo se deriva." (Historia, vol. II, pág. 127). ¿Cómo?... resulta que el propio Herodoto, que atribuye la construcción a Keops afirma que no se enterró allí… ¿Quedaría la verdadera tumba del faraón en el valle próximo a las pirámides, más cerca del río? La verdad, no se sabe.
Kefren, a quién se le atribuye la Segunda Pirámide de Gizeh, no fue el sucesor inmediato de Khufu. En medio hubo un faraón llamado Radedef (Dyedefra), cuyo reinado duró ocho años. Por motivos que los estudiosos no consiguen explicar, escogió erigir su pirámide en un lugar un poco distante de Gizeh, a unos ocho kilómetros. Tenia la mitad del tamaño de la Gran Pirámide y contenía la acostumbrada "cámara mortuoria" que, al ser visitada, se reveló vacía.
La Segunda Pirámide de Gizeh, la construida, según Herodoto y la historiografía oficial, por Kefren, presenta dos entradas en lugar del habitual pasaje por la cara norte. La primera lleva hacia una cámara inacabada. La segunda lleva a una camara donde se encontró un sarcófago de granito vacío y con la tapa caída y quebrada. Una inscripción en árabe denunció una visita varios siglos antes. No se sabe si había algún cadáver.
La Tercera Pirámide de Gizeh, atribuida a Micerinos, aunque mucho menor que las otras, posee características singulare: en la construcción del núcleo, fueron empleados los mayores bloques de piedra encontrados en las tres. Los dieciséis cursos inferiores no eran revestidos de calcáreo, sino de granito. Primero fue erigida como una pirámide menor y después su tamaño fue doblado. Por eso existen dos entradas utilizables y una tercera inacabada, tal vez una "tentativa" no aprobada por los constructores. En ella, hay varias cámaras y aquella que es considerada la principal, la "cámara mortuoria", fue explorada en 1837 por Howard Vyse y John Perring, que encontraron un magnífico sarcófago de basalto, pero de nuevo, vacío, como de costumbre.
Sin embargo, cerca de aquel sarcofago, Vyse y Perrig hallaron un pedazo de un féretro de madera con el nombre "Men-ka-ra" y los restos de una momia "posiblemente de Menkara", una confirmación directa de la afirmación de Herodoto de que la Tercera Pirámide "pertenecía la Miquerinos". Pero dataciones recientes, obtenidas con Carbono 14 han demostrado que el féretro de madera no es anterior al 660 a.C.
Después de Micerinos vino Shepsekaf, que curiosamente, fue enterrado en una monumental mastaba, cuya cámara mortuoria contenía un sarcófago de granito negro, que había sido saqueado en la antigüedad. Se dice que intento construir varias pirámides, pero que todas resultaron un fracaso, no pudiendo erigir finalmente ninguna.
La 5ª. Dinastía comenzó con Userkaf, sucesor de Shepsekaf, que construyó su pirámide en Saqqarah, cerca del complejo de Djoser. Fue expoliada y se encontraron números restos de entierros intrusos. Su sucesor, Sahura, construyó su pirámide al norte de esta, en Abusir, no mu bien conservada en la actualidad y en la que tampoco se encontró nada dentro de la supuesta "cámara mortuoria". Neferirkara, que ascendió al trono después de Sahura, construyó su complejo funerario en un lugar no muy distante del escogido por su antecesor. La cámara que existía dentro de su pirámide no terminada (o devastada) fue encontrada también vacía.
Neuserra, el faraón siguiente, construyó su pirámide cerca de las de sus antecesores. Contenía dos cámaras, encontradas vacías, sin el menor vestigio de enterramientos. Sin embargo, Neuserra es conocido por su templo funerario, construido en forma de obelisco corto y grueso, de 36 metros de altura, asentado sobre una pirámide truncada.
La pirámide de Unis (ultimo faraón de la 5ª. Dinastía, o, como prefieren algunos, el primero de la 6ª) marca un importante cambio de costumbres. En ella fue donde, en 1880, se encontraron los primeros “Textos de las Pirámides”, escritos en las paredes de cámaras y pasillos. Las cuatro pirámides de los faraones de la 6ª. Dinastía, que siguieron a Unas - Teti, Pepi I, Mernera y Pepi II -, presentaban complejos funerarios similares, con la inclusión de aquellos textos en las paredes. Pero, de nuevo, todos los sarcófagos de basalto o granito encontrados en las "cámaras mortuorias" estaban vacíos, con excepción del existente en la pirámide de Mernera, donde si había una momia (aunque, posteriormente, se descubrió que era de un entierro intruso posterior)
¿Qué pensar entonces de la tradicional asimilación entre pirámides y enterramientos faraónicos? Pues, según Sitchin, todos los hechos demuestran lo contrario.
Las pirámides del Viejo Imperio nunca abrigaron el cuerpo de un faraón porque no fueron erigidas con ese objetivo.
El objetivo era guiarlos en su camino hacia la Escalera al Cielo, función que tenían las primeras pirámides, las de Gizeh, construidas, según nuestro autor, por los dioses.
“Lo que los faraones intentaron copiar, unos después de los otros, sugiero, no fue la pirámide de Djoser, como dicen los libros, sino las Pirámides de los Dioses: las pirámides de Gizeh.” (pág. 373)
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Excelente! gracias por la recopilación
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