PA LO QUE HEMOS QUEDAO: ESTRELLAS DEL CINE MUDO. MARY PICKFORD. LA NOVIA DE AMÉRICA

Perpetrado por Oskarele.

Era muy chiquitilla. 1.56 de altura. Pero se convirtió en una de las estrellas más grandes de aquellos primeros años de la Historia del Cine, de aquellos años en los que Hollywood se estaba forjando como la Meca de este nuevo arte que día a día se hacía más popular. Una de las primeras damas del cine que impuso su estatus de estrella para lograr cobrar casi lo mismo que las estrellas masculinas. Mary Pickford, “Little Mary”, “The Girl With The Golden Hair” o “The girlfriend of America”, como queráis llamarla.

Pero en realidad se llamaba Gladys Louise Smith. Nació un ocho de abril, de 1892, en Toronto (Ontario, Canadá), en el seno de una familia pobre que, además, se rompió cuando nuestra protagonista tenía solo seis añicos, fecha en la que fallece su padre por culpa de su afición desmedida por el alcohol. Desde entonces su madre, Charlotte Pickford, tuvo que tirar pa’lante con la pequeña Gladys y con dos niños aun más pequeños, Lottie y Jack. Pero, aconsejada por algún amigo, la madre decidió introducirlos en el mundo del teatro y del vodevil, tan de moda en aquella época. Y fue una decisión tremendamente acertada, pues la joven Gladys, bajo el nombre de Baby Gladys Smith, se convirtió en todo un éxito en los escenarios.

Ya desde entonces, con unos diez añicos, comenzó a desarrollar una personalidad complicada a medio camino entre la alegría desmedida y la depresión insalvable (lo que hoy en día llamaríamos un complejo bipolar).

El éxito teatral le llevó a que en 1907, decidida y convencida, se marchase sola a la Gran Manzana, con solo 15 abriles, para una entrevista de trabajo con el conocido productor de Broadway David Belasco, que quedó encandilada con la bella Gladys, a quien contrató y a quien recomendó que cambiase de nombre artístico. Desde entonces pasaría a llamarse Mary Pickford (Pickford era el apellido de soltera de su madre).

Y claro, de Broadway al Cine, en aquellos tiempos, había un paso. Y nuestra protagonista, ansiosa por conocer ese nuevo arte, visitó el estudio de David Wark Griffith, la Biograph, y lo conoció, además de encandilarle con sus ricitos de oro. Griffith, que tonto no era, vio las enormes posibilidades de esta adolescente y decidió contratarla. Su primera aparición será en "Mrs. Jones Entertains" (1909), a las ordenes del genio, con el que realizaría varios cortos mas, en muchos de los cuales compartía protagonismo con Owen Moore, que en 1911 se convertiría en su primer marido. Además, en ese período coincidió con dos actrices esenciales en la industria cinematográfica americana, las hermanas Lillian y Dorothy Gish.

Y poco a poco se fue convirtiendo en una estrella, gracias, por un lado, a su talento, y por otro, a su enorme ambición. En el año 1911 se trasladó a la compañía de Carl Laemmle, pero regresó junto a Griffith en 1912, para marcharse en 1913 con Adolph Zuckor y formar parte de los Famous Players, que acabaría convirtiéndose en la Paramount. Y pronto comenzó a hacer largometrajes, como, por ejemplo, “The Poor Little Rich Girl” (Pobre niña rica), “Rebecca of Sunnybrook Farm” o “The Little American”, todos de 1917.

Por esta época conoce a una persona trascendental en su vida, el genial y exitoso Douglas Fairbanks, en aquel momento en todo lo suyo, pero también casado y padre de una hija, algo que impidió que se enamorasen y se casasen en 1920, tras divorciarse ambos de sus parejas. El caso es que desde 1919, aparte de amantes, eran socios, pues, junto a Chaplin y a Griffith habían fundado la United Artist, de la que ya hablamos en los artículos respectivos de estos directores.

Desde entonces distanció algo sus actuaciones cinematográficas, aunque hizo grandes películas como "Polyanna" (1920) de Paul Powell, “Little Lord Fauntleroy” (El Pequeño Lord Fauntleroy" (1921) de Alfred E. Green, “Tess of the Storm Country” (Tess En El País De Las Tempestades, de 1923) dirigida por John S. Robertson, “Rosita” (Rosita, La Cantante Callejera, de 1923) dirigida por Ernst Lubitsch, o “My Best Girl” (Mi Chica Favorita, de 1927), dirigida por Sam Taylor.

Con su marido, Fairbanks, coprotagonizó películas como “The Gaucho” (El Gaucho, de 1927), dirigida por F. Richard Jones, o “The Taming of the Shrew” (La Fierecilla Domada, de 1929), dirigida por Sam Taylor, entre otras.

Pero en 1928 fallece su madre Charlotte. Y el frágil equilibrio mental de nuestra protagonista, ya conocido incluso en Hollywood, se sacudió por una fuerte depresión. Dejó el cine durante un año, coincidiendo esto con el nacimiento del sonoro. Y en su regreso, con “Coquette” (Coqueta), dirigida de nuevo por Sam Taylor en 1929, y ya sin tirabuzones, dio un cambio radical en su trabajo y en su aspecto, lo que le valió el Óscar a la mejor actriz, el primero en esa categoría para una película sonora.

Curiosamente, solo hizo cuatro películas más: la antes mencionada “La fierecilla domada”, “Forever Yours”, western mediocre dirigido por Marshall Neilan en 1930, “Kiki”, musical, también mediocre, dirigido por Sam Taylor en el 31, y su ultima película, “Secrets” (Secretos), otra del oeste dirigida por el genial Frank Borzage en 1933. Desde entonces dejó de actuar, limitándose a producir películas con la United Artist (hasta 1956, cuando la vendió por una pasta), que desde 1935 era solamente de la pareja Pickford-Fairbanks… que por otro lado también hacia aguas, más que nada por la deteriorada salud mental que a la depresión por la muerte de su madre se sumó la de su hermano Jack… y poco después la de su otra hermana, en 1936… el mismo año en que se rompió el matrimonio.

No tuvieron hijos. Ni los tendría la Pickford, aunque en junio de 1937 se casó con Charles Rogers, doce años menor y con quien adoptaría, en 1943, dos niños: Ronald y Roxanne.

Desde entonces se fue alejando cada vez más de las luces y del mundo de Hollywood. Y acercando cada vez más a la botella…

En 1975, con 82 tacos, le conceden un Oscar honorífico por su contribución al desarrollo de la industria.

Cuatro años después, el 29 de mayo de 1979, la Novia de América fallece a causa de un derrame cerebral.

Tenía 87 años.