La Allium cepa, lo que comúnmente llamamos “cebolla”, es una rica planta cuya raíz en forma de bulbo ha sido usada en cocina desde tiempos inmemoriales. Y bien buena que está. Pero además es un alimento estupendo y tiene propiedades importantísimas para la salud: es un potente remedio contra el reumatismo, como el ajo (ambas se encuentran en la misma familia taxonómica), disuelve el ácido úrico (responsable de la enfermedad de la gota, que afecta a los riñones y las articulaciones), lucha contra las infecciones gracias a sus sales de sosa y su potasa, que alcalinizan la sangre; y ayuda a prevenir la osteoporosis, además de proteger el sistema cardiovascular.
Pero hay un problema con la cebolla.
Cuando la cortamos para preparar una rica ensalada o el sofrito de una salsa, suele pasar que nuestros ojos se irritan por la acción de la dichosa cebolla. ¿A qué se debe esto?
Vayamos por partes:
El bulbo de la cebolla está compuesto por varias capas concéntricas.
Las cebollas contienen, además, una cosica llamada “trans-(+)-S-(1-propenil)-L-cisteina sulfóxido”, una molécula que es inodora.
Cuando cortas las diferentes capas de la cebolla se producen roturas celulares que permiten a un enzima llamada alinasa entrar en contacto con el transnosequenosecuantos mencionado antes, produciendo lindezas con nombres como “piruvato”, “amoniaco” y “syn-propanotial-S-óxido” o sulfóxido de tiopropanal.
Este sulfóxido de tiopropanal (o propanotial) es una sustancia irritante que tiene como objetivo la defensa frente a depredadores.
No se sabe con certeza porqué este propanotial es lacrimógeno, pero se cree es debido a que en contacto con el agua se descompone dando popanal, ácido sulfúrico y ácido sulfhídrico.
Posiblemente es el ácido sulfúrico, un ácido muy fuerte, el que daña la membrana conjuntival produciendo el lacrimeo (al entrar en contacto con el agua que humedece el ojo).
Por este motivo el remedio casero de toa la vida para evitar las lagrimas de cebolla, como las llaman en mi pueblo, que consiste en cortarla bajo un chorro de agua o ir enjuagándola conforme se corta, tiene una explicación química clara: el agua ayuda a eliminar el propanotial, que es soluble en agua. Si vamos enjuagando los cachicos el propanotial se va perdiendo. Y, milagro, ya no lloramos.
Bueno un poquito igual si,,, pero mucho menos de lo acostumbrado.
Otra opción es hacer lo del señor de la foto…
Por último, la cebolla tiene otro problemica: al consumirla cruda suele oler de forma algo desagradable (cuestión de gustos… ) el aliento.
Esto se debe a la presencia de varias sustancias azufradas. Especialmente al acido sulfhídrico del que hablábamos antes. Pero el mal olor lo producen otras cosicas como el dipropildisulfuro o el alilpropildisulfuro. Vaya tela.
¿Para evitar este daño colateral del consumo de cebollas?
Un caramelo
;)
Mas info y fuentes por aquí: http://es.wikipedia.org/wiki/Allium_cepa, aquí: http://www.alimentacion-sana.com.ar/informaciones/novedades/cebolla.htm, aquí: http://www.remediospopulares.com/Cebolla.html, aquí: http://www.uv.es/jaguilar/curioso/cebollas.html.
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